Quienes hemos participado en presentaciones de planes gerenciales corporativos o de una potencial inversión en un proyecto específico, encontramos un común denominador: normalmente se presentan cifras en un escenario cercano a lo perfecto, considerando el sesgos optimista de sus promotores y dejando de lado la cuantificación de eventos de riesgo que podrían dar al traste con las estimaciones. Esto ocurre en gran medida en proyectos soportados por el Estado, en donde la eficiencia económica y financiera queda de lado producto de la impericia de sus promotores o en casos aún peores por intereses particulares de algunos de los participantes. En este sentido, es necesario que los técnicos financieros realicemos análisis de riesgos serios que nos permitan contar un marco claro de las probabilidades de éxito.
En el presente artículo realicemos una primera aproximación al tema de riesgos desde los rigurosos elementos de la Global Association of Risk Professionals (GARP). En este artículo específico hacemos referencia a GARP (2017). Foundations of Risk Management.
¿Qué es el Riesgo?
En análisis financiero, el riesgo se refiere principalmente a la variabilidad que presentan los ingresos y costos en una firma o proyecto. En esta misma línea existes 2 conceptos centrales:
Pérdida Esperada (PE): Es la cantidad que una firma o proyecto espera perder en el desarrollo normal del negocio. Por ejemplo, un banco esperará un determinado % de morosidad en sus créditos que compensará con el costo de financiamiento que cargue a sus deudores. En el caso de proyectos de infraestructura podríamos considerar tiempos típicos esperados en los cuales el proyecto dejaría de operar, lo cual es considerado igualmente en el análisis financiero.
Pérdida NO esperada (PNE): Considera cuánto podría ser la pérdida de una firma o proyecto fuera del curso normal del negocio. Por ejemplo, cambios significativos en el entorno económico, debilidades inesperadas en la gestión del proyecto, etc.
Para la cuantificación de riesgos se recurre a herramientas cuantitativas como el Valor en Riesgo (VaR por la siglas de Value at Risk) y el Capital Económico (disponibilidad de recursos para hacer frente al VaR). Asimismo, se utilizan evaluaciones cualitativas como el análisis de escenario y los test de estrés.
¿Cuáles son los tipos de Riesgos?
Los tipos de riesgos son numerosos y en muchas ocasiones particulares de cada industria o tipo de proyecto. Sin embargo, internacionalmente se utiliza la siguiente segmentación:
Riesgos de mercado: son los riesgos ligados a la variación de precios críticos en los mercados financieros ---> riesgo de tasas de interés, riesgo de precios en el valor de las acciones, riesgo en la variación del tipo de cambio, riesgo de precios de commodities (materias primas).
Riesgo de crédito: riesgo de que la contraparte no cumpla con sus obligaciones contractuales ---> riesgo de baja en la calificación crediticia (deterioro del crédito), riesgo de que no se cumplan los pagos acordados durante determinado tiempo (tiempo de default), riesgo detener que ejecutar las garantías que respaldan la operación (riesgo de bancarrota).
Riesgo de liquidez: riesgo de no contar con el flujo de caja necesario para atender las obligaciones o el riesgo de no poder efectuar la transacción al costo actual del mercado financiero.
Riesgo operacional: riesgo de incurrir en pérdidas debido a debilidades en la gestión de la firma o el proyecto. Este tipo de riesgo recalca nuevamente la importancia de contar con una Empresa sólida en los proyectos de Alianza Pública Privada (APP). Además de contar con fortaleza financiera debe contar con la experiencia y conocimiento del sector.
Riesgo legal y regulatorio: cambios en el ámbito legal o regulatorio o bien el mapeo inadecuado de las restricciones que impone el marco legal y regulatorio vigente (es decir un pobre Due Diligence legal).
Riesgo de negocio: riesgos de variaciones en la demanda por el servicio o la tarifa que pueda cobrarse por el mismo (disposición a pagar). Asimismo, se consideran los riesgos por decisiones estratégicas por parte del equipo gerencial del proyecto en marcha. De nuevo resalta la importancia de empresa con amplio conocimiento para el desarrollo de proyectos de infraestructura.
Riesgo estratégico: riesgo por decisiones de inversión en torno a las cuales no existe una horizonte claro de resultados (pérdidas o utilidad). En el caso de los proyectos APP, un elemento a considerar es el alcance del rol de los participantes. ¿Debe un concesionario tomar el rol del banco? ¿Debe y puede un banco tomar el rol de un concesionario?, etc.
Riesgo de reputación: ligado a la percepción de confianza que proyecta la empresa o bien la percepción de que sus acciones se basan en negociaciones justas. La materialización de este tipo de riesgos ha demostrado ser devastador para el éxito de proyectos de infraestructura pública.
En las siguientes entregas de la sección "Análisis de Riesgos" iremos profundizando aún más en los elementos técnicos de esta importante rama de la estructuración financiera.